La muerte de una mujer de 70 años, cuyo cuerpo fue descubierto momificado en una silla más de dos años después de su muerte, conmovió esta semana a Italia, reavivando el debate sobre la soledad de los abuelos.
Marinella Beretta, que no tenía parientes cercanos, fue hallada el viernes en su casa de Prestino, cerca del lago de Como, en Lombardía (norte de Italia).
Los restos momificados de la mujer fueron descubiertos por la Policía, que acudió al lugar tras ser alertada sobre el peligro de caída de árboles en su jardín.
Los vecinos de Beretta, que no la veían desde septiembre del 2019, pensaron que se había mudado por la pandemia del COVID-19